ENSAYO "FUERA DEL LIBRETO"

COMPROMISO SOCIAL
En el siguiente trabajo voy a hablar del compromiso social en la vida de los jóvenes. Específicamente voy a hablar sobre la etiqueta de “desinterés” que se les ha puesto a los millennials. Elegí este tema porque la sociedad se encuentra en un momento en que necesita más de nuestra ayuda, emocionalmente como físicamente.
En lo que se basa este ensayo es en la Conferencia Magistral del Doctor Bernardo Kliksberg, presenciada en el estado de Puebla, en la UPAEP. La conferencia tuvo como punto central el hacer ver a los jóvenes el compromiso que se tiene en el mundo acerca de lo que pareciera tan sencillo, pero que necesita de gente tan innovadora y con energía para seguir adelante. El exponente trató de exhortar a los jóvenes a que tomaran conciencia de la situación que está viviendo el mundo, desde África, Haití, y hacer la comparación de entre países europeos que tratan estos temas con delicadeza, donde por citar un ejemplo, los terremotos en dos ciudades, Haití y China, donde en esta última la educación de la prevención se tiene muy presente, y tienen un plan muy meticuloso que seguir para evitar tantas muertes. Sin embargo, en Haití, no se tiene la misma educación ni los recursos necesarios para reforzar las infraestructuras para contrarrestar ese tipo de accidentes. Inclusive un tsunami en Estado Unidos de América, que fue anunciado 3 días antes, las personas que tenían las posibilidades económicas salieron como pudieron, pero las personas de bajos recursos, generalmente inmigrantes, no pudieron salir de la ciudad y lo único que pudieron hacer es subir a los edificios más altos para poder sobrevivir. En todos los casos de desastres naturales, es posible ver cómo otros países auxilian, porque ven las condiciones de las personas y saben que cuestiones así necesitan de mucho apoyo, y se mueven personas por todo el mundo para recolectar víveres para quienes lo necesitan y entre ellos, se encuentran miles de jóvenes que se preocupan por tales situaciones y utilizan las redes sociales para pedir ayuda y sin si quiera verlo las personas adultas que los etiquetan como “desinteresados” hacen que la noticia llegue a todas partes del mundo y que muchas personas puedan ayudar a tales causas.
El expositor, Bernardo Kliksberg, originario de Argentina, es una persona comprometida con la sociedad, quien busca la conciencia social para la ayuda a los más necesitados, principalmente trabaja para las personas de extrema pobreza donde las personas o apoyos no llegan con facilidad Ha trabajado como asesor de organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, como la ONU, UNESCO, UNISEF, OIT, PUNID, entre muchas otras, y ha asesorado a empresas en la gestión social, del que se le considera como padre. Cuenta con 5 carreras universitarias y diferentes premios a sus méritos a la sociedad, entre ellos se encuentra Honoris Causa, entregado por diferentes universidades e incluso por el propio Papa en el tiempo que aún era plesbérito, se le ha homenajeado con los premios: Novel de Economía Amartya Sen, Orden al Mérito y Premio Fausto Sarmiento. Es un escritor excepcional, principalmente sus libros son de ética y hasta ahora ha escrito 63 libros, de los cuales se han traducido en diferentes idiomas, como ruso, inglés, francés, árabe, hebreo, chino y portugués.  Se dedica a ayudar a familias en extrema pobreza y su objetivo es hacer llegar a más personas las situaciones en que vive el mundo y cómo podríamos ayudar.
Lo que más me pareció interesante de la conferencia del Dr. Bernardo Kliksberg, es que sus estadísticas pueden mostrar lo que nosotros no podemos ver a simple vista, y te pone a reflexionar sobre lo que hacemos y cómo es el mundo.  Una cifra que dio en la conferencia fue que sólo 8 personas contienen la riqueza de más del 50 % de la población, y tan sólo representan el 1%, tienen más dinero que el 99 % de todo el mundo. Y esto es de pensar, porque a veces el hombre se llena de codicia, quiere acaparar todo para él, y son ellos quienes hacen más daño a la sociedad, porque su avaricia no les deja ver los problemas que le están dejando al mundo, como lo hacen muchas empresas, contaminación, y que a veces las empresas de esos empresarios tan ricos, son las que menos quieren apoyar en un cambio a la sociedad, prefieren que todo se siga deteriorando y conservar su riqueza. Y lo que me llama aún más la atención es que el Dr. Bernardo Kliksberg, a pesar de ser un economista de mucho respeto, no sólo está pensando en la riqueza monetaria que está haciendo, sino que su dinero lo destina para hacer del mundo algo mejor, ayuda a los más necesitados, que es lo que deberíamos hacer todos. Año con año construye hogares para familias desamparadas y está en constante comunicación con los jóvenes, porque una labor tan grande necesita de muchas personas y son los jóvenes mismos quienes se ofrecen como voluntarios con tal de ver un mundo mejor. Los jóvenes somos el futuro no de nuestra nación, sino del mundo, porque todos estamos interrelacionados.
Y no sólo lo vemos en sus campañas del gran expositor, sino que existen mil campañas dirigidas por jóvenes para hacer conciencia social. Y es que para los jóvenes lo más importante, no es el celular, como podrían pensar los mayores, o inclusive el internet, tenemos conciencia de lo que pasa en el mundo, y una manera de reflejar nuestro disgusto es a través de los medios de comunicación actuales, como son las redes sociales, nosotros podemos causar una revolución que puede afectar al mundo físico, como lo fueron las elecciones en Francia, nosotros tenemos el poder de difundir en todo el mundo nuestro disgusto, pero actuamos por cuestiones justas, cuestiones que son mejor para todo el mundo. Tenemos conciencia de lo que está pasando a nuestro alrededor y no es justo que las personas mayores nos cataloguen como “desinteresados”, porque somos los más interesados en las cuestiones de desigualdad y estamos conscientes del impacto que podemos lograr, y si ella es una cuestión para designarnos como “atrevidos” o “peligrosos”, en realidad no es ese el fin, el fin es que podamos hacernos escuchar. Y lo peor del asunto es que los propios jóvenes se crean las etiquetas que la sociedad les pone, y de tanto escucharlo, terminen por actuar así; ese sería un mayor problema, y la sociedad no se da cuenta de lo malo que son esos comentarios para cada joven, quien solo busca la manera de manifestar su desagrado y su ayuda a lo justo.
El compromiso que un joven tiene es no dejar que se pasen de manera desapercibida hechos que afectan a la sociedad, si bien no son personas que tengan la solvencia económica para actuar por los demás, son personas creativas que aunque no tengan las cosas a su alcance, buscan la manera de apoyar, ya sea con campañas, como voluntarios o simplemente ayuda en las redes sociales o portales para recaudar dinero para las causas más nobles. Un joven es un ser sentimental, que percibe las necesidades del otro y que trata de empatizar para poder tener mejores relaciones, y eso es lo que deberían aprender los adultos, a dejar de lado las diferencias sociales o disgustos entre personas, todos necesitamos de todos, y eso es en lo que creemos los jóvenes, en sacar todo lo malo que tenemos en nuestros corazones y llevarnos una vida más tranquila y feliz, pudiera ser la razón por la cual nos llaman “desinteresado”, pero no hay que confundir términos, uno debe aprender a liberarse de las tensiones para así poder mostrar una mejor cara al mundo y empezar con una buena acción y comenzar de nuevo un proceso que nos trae alegría y satisfacción.
Y es que cuando ayudamos a otra persona incluso en nuestro hogar, nos sentimos liberados, es una manera de ser feliz sin necesidad de grandes cosas, es cierto que la felicidad se encuentra en los pequeños detalles, y no nos cuesta ayudar al otro, sí bien el apoyo económico es una parte importante, el apoyo moral también lo es. Las personas con necesidades a veces solo necesitan unas palabras de aliento para seguir con su camino. A veces los jóvenes no somos buenos dando discursos, pero por el simple hecho de estar ahí​, ya somos una fuerza alentadora de que no todo está perdido, a veces con nuestro positivismo podemos alentar a otros, a demostrar que sí se puede. Somos jóvenes que en la mayor simpleza encontramos una manera divertida de ver la vida, y creo que es la mejor característica de los jóvenes, el hacer que otras personas se sientan bien, el hacerlas ver que existen posibilidades para todo y que a pesar de nuestra personalidad siempre pueden contar con nosotros.
La manera más trascendental en la que podemos gastar la vida, es en hacer algo especial por los demás, el simple hecho de pensar en personas más necesitadas nos hace personas más empáticas y no se dudaría seguir un camino de solidaridad, ir por el objetivo de ayudar a los más necesitados, aunque esto implique dejar a un lado todo lo que tenemos para ponernos al servicio de nuestros semejantes.
Así, se ha visto después de argumentar en este trabajo sobre el compromiso social en los jóvenes, y que, en efecto, son ellos mismos los protagonistas de la solidaridad. Entonces, después de demostrar que son jóvenes no son desinteresados, sino al contrario, son personas que se preocupan por la justicia social, solo queda preguntarse si ¿están dispuestos los adultos a aceptar a las nuevas generaciones y sus medios de alcance social?
Referencias:
Curso K1023. (S/f). Biografía de Bernardo Kliksberg. Consultado 10/05/2017 a las 8:47 p.m.  Recuperado de: http://tpingenieriaysociedad.blogspot.mx/2010/07/biografia-bernardo-kliksberg.html
Kliksberg, B. (2017). Conferencia Magistral del Dr. Bernardo Kliksberg. Conferencia llevada a cabo en UPAEP Campus Central, Puebla.


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